El nuevo alcalde de Nueva York, Eric Adams, presentó este miércoles su primera propuesta presupuestaria para la ciudad, planteando una reducción del gasto, pero manteniendo sin cambios los recursos para la Policía, en línea con su gran prioridad de combatir el crimen.
«Estamos recortando el gasto, haciendo que el Gobierno sea más eficiente, invirtiendo en seguridad pública y dando ayuda muy necesaria a las familias trabajadoras de nuestra ciudad», defendió Adams al anunciar las cuentas.
El alcalde demócrata, que asumió el cargo en enero, propuso para el próximo ejercicio, que va de julio a julio, un presupuesto de 98,500 millones de dólares, 2,300 millones por debajo de las proyecciones hechas por la administración de su antecesor, Bill de Blasio.
Con respecto a las cuentas aprobadas en 2021, la propuesta supondría un recorte de unos 4,000 millones, después de que el año pasado Nueva York elevase el gasto por encima de los 102,000 millones gracias a importantes ayudas federales para lidiar con la pandemia.
El plan inicial de De Blasio, sin embargo, se situaba 6,200 millones de dólares por debajo del presentado hoy por Adams.
Pese a ello, el nuevo alcalde insistió en que sus cuentas son prudentes y prevén una reducción del número de empleados municipales, que con el anterior consistorio se situaron en máximos históricos.
El Ayuntamiento prevé recortar 3,200 puestos en el año fiscal 2022 y 7,000 en el siguiente eliminando plazas vacantes y sin utilizar despidos.
El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) mantendrá su actual presupuesto, según confirmó Adams en una conferencia de prensa, en la que reiteró que combatir el crimen y la violencia armada debe ser la prioridad número uno.
«El NYPD es nuestra primera línea de defensa contra la violencia con armas. Vamos a hacer nuevos esfuerzos para reforzarlo, mientras continuamos con nuestra misión de involucrar a la comunidad», dijo el alcalde.
Durante el año pasado, en todo Estados Unidos se escucharon con fuerza voces que pedían reducir los presupuestos de las agencias del orden en respuesta a los repetidos casos de violencia policial, sobre todo a raíz de la muerte del afroamericano George Floyd en Minneapolis.
Con el objetivo de prevenir el crimen, Adams anunció que aumentará en 30,000 las plazas del programa municipal de empleo veraniego para jóvenes, que ofrecerá 100,000 puestos este año, su máximo histórico.
La idea de este plan es ofrecer alternativas a jóvenes con más riesgo de caer en el crimen durante el verano, una época en la que no hay escuelas y habitualmente aumentan los episodios violentos.
La propuesta de Adams será ahora negociada por los legisladores municipales, que son los que deben aprobar las cuentas de forma definitiva.
